Cada imagen en movimiento transmite la energía, el ritmo y la personalidad del entorno que se retrata. Capturar a los peatones que caminan por una avenida concurrida o a las estelas de las luces de los autos es un verdadero desafío para cualquier fotógrafo. Además de las habilidades técnicas, en este caso también se requiere creatividad, gusto artístico y mucha práctica.
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El movimiento puede representarse de forma fluida o capturarse en un instante preciso: en cada caso, es fundamental adoptar la técnica adecuada.
Ya sea que desees congelar el movimiento de un ciclista en plena ciudad o capturar la fluidez de las nubes que la sobrepasan, comprender cómo interactuar con la velocidad de obturación y el ritmo del sujeto puede abrir un nuevo mundo de posibilidades para tus fotos urbanas.
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La velocidad de obturación: la clave para controlar el movimiento
La velocidad de obturación es el primer ajuste al que debes prestar atención al realizar fotografía en movimiento, ya sea congelando un instante o creando efectos de desenfoque que resaltan el dinamismo.
Ajustar este parámetro permite definir cuánto tiempo el sensor de la cámara está expuesto a la luz, lo que se traduce en nitidez o desenfoque según la velocidad que elijas.
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A continuación, detallamos tres técnicas para aprovechar al máximo este ajuste:
Congelar el movimiento, es la técnica que se usa para representar todos los detalles de un sujeto en modo perfectamente definido sin desenfoque.
Cuando estamos ante un movimiento constante y repetitivo, como el batir de las alas de un ave en vuelo o una persona que corre, puedes anticiparte disparando un instante antes del momento deseado.
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De esta manera, congelarás el movimiento ajustando el obturador a una velocidad rápida de cierre, generalmente superior a 1/500 s, lo que reduce el tiempo de exposición de la foto.
Cuando, en cambio, el movimiento no es repetitivo, una alternativa posible para ayudarte a capturar el momento exacto es que uses la función de disparo múltiple, que permite realizar una serie de capturas en secuencia. Esta técnica te da la posibilidad de tomar múltiples imágenes seguidas y tener más opciones de elección.
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Desenfoque del movimiento
Las fotografías congelan el tiempo y el movimiento, pero si el sujeto de una foto sigue moviéndose mientras la cámara aún está tomando la imagen, el movimiento se manifiesta en la foto como un desenfoque.
El desenfoque de movimiento en una imagen se logra, de hecho, configurando un tiempo de exposición lo suficientemente lento para que el sensor de la cámara capture la acción del sujeto.
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La cantidad de luz disponible juega otro papel importante en la creación de fotos con desenfoque de movimiento. Durante la noche, la poca luz que se puede captar en exteriores hace necesario reducir la velocidad de obturación, permitiendo que la cámara tenga más tiempo para absorber la luz. Esto prolonga el tiempo que tiene la cámara para capturar el movimiento de los objetos en el encuadre.
Existen dos tipos de fotos con desenfoque de movimiento comúnmente utilizados. Puedes desenfocar el sujeto en primer plano o mantenerlo en foco mientras desenfocas el fondo. La decisión depende del efecto que quieras lograr. Al enfocar un objeto o una escena en el fondo, se desenfoca el objeto en rápido movimiento en primer plano, como un auto o un tren, sugiriendo al espectador que el objeto se desplazaba a alta velocidad.
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El barrido o panning es una técnica que consiste en capturar a un sujeto en movimiento siguiendo su trayectoria con la cámara.
Para realizar el panning, necesitas mover la cámara al mismo tiempo que tu sujeto, manteniendo la misma velocidad y dirección de su desplazamiento. De esta forma, lograrás que el fondo aparezca desenfocado mientras el sujeto se mantiene nítido y en foco.
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¿Lo mejor del panning? No es complicado, y permite crear esas imágenes de alto impacto en las que el sujeto destaca contra un fondo lleno de dinamismo. Para capturar peatones o ciclistas en movimiento, utiliza una velocidad de obturación de entre 1/60 s y 1/125 s, sujeta la cámara con firmeza y acompaña el movimiento del sujeto en su recorrido. Si la velocidad del sujeto aumenta, como en el caso de un vehículo, deberás bajar la velocidad de obturación hasta 1/30 s.
Para obtener los mejores resultados, asegúrate de tener una vista clara del sujeto y suficiente espacio para mover la cámara de forma paralela a él, lo que facilitará que el efecto se vea natural y potente.
El movimiento de la luz: estelas de vehículos
Fotografiar estelas de luz en la ciudad es una forma fascinante de capturar movimiento. Elige una locación oscura en donde destaque el tránsito vehicular u otras luces en movimiento. Es ideal que te ubiques en un puente o en un nivel elevado que ofrezca una buena visión de la calle.
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Usa un trípode para evitar vibraciones, configura un ISO bajo y selecciona una velocidad de obturación prolongada (entre 5 y 30 segundos).
Esta técnica, ideal para la noche, permite captar el rastro de luces de los autos en movimiento, añadiendo un toque dinámico y vibrante a tus composiciones urbanas.
Consejo extra: activa el temporizador de 2 segundos para evitar movimientos no deseados al presionar el disparador.
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Capturar personas en movimiento
Una opción para añadir dinamismo y contexto a tus imágenes urbanas, mostrando el flujo natural de la ciudad, es capturar a las personas en movimiento.
Para lograrlo, puedes jugar con el contraste entre nitidez y desenfoque, eligiendo mantener el fondo nítido mientras los sujetos en movimiento aparecen ligeramente borrosos. Este efecto da una sensación de actividad continua. Para conseguir este tipo de desenfoque de movimiento, prueba con una velocidad de obturación entre 1/20 s y 1/30 s.
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En áreas de gran tránsito, como estaciones de tren o intersecciones, un desenfoque parcial sobre las figuras humanas ayuda a reflejar la energía de la multitud sin perder los detalles arquitectónicos. Si deseas un desenfoque más pronunciado para mostrar aún más dinamismo, puedes reducir la velocidad de obturación hasta 1/10 s, pero tienes que hacerlo con cuidado, porque corres el riesgo de que otros elementos de la escena se vean borrosos.
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Asegúrate de mantener una postura estable o, mejor aún, utiliza un trípode para que los elementos estáticos permanezcan nítidos en el encuadre. Configura el ISO de acuerdo con las condiciones de luz. Con estos ajustes, conseguirás que el movimiento humano en la escena se convierta en el verdadero protagonista.
Movimiento natural en entornos urbanos
Las nubes son un excelente sujeto para capturar el movimiento en la ciudad. Para ello, utiliza una velocidad de obturación prolongada. Si tomas tus fotos durante el día durante es imprescindible el uso de un filtro de densidad neutra (ND) fuerte para evitar la sobreexposición. Esto permite exposiciones largas de hasta 30 s, con las que conseguirás un efecto de fluidez en las nubes, ideal para crear una atmósfera envolvente sobre edificios o paisajes urbanos.
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Puede resultar asimismo interesante retratar el contraste entre la esteticidad de edificios urbanos y el movimiento de las aves en vuelo. Empieza utilizando el enfoque puntual, es decir el que está en el centro, desactivando todos los demás puntos de enfoque.
Dispara en ráfaga, para aumentar las posibilidades de lograr una buena foto dentro de una serie de tomas.
Céntrate en un solo ejemplar, aunque haya muchas aves en el lugar. Esto evitará que pierdas el enfoque. Es recomendable enfocar el ave cuando esté a una buena distancia y seguirla hasta que su tamaño sea considerable en el encuadre. Es ahí cuando debes tomar la foto.
Movimiento intencional de cámara: una técnica creativa
Para añadir un toque artístico a tus fotos de sujetos urbanos, puedes probar el Movimiento Intencional de Cámara (ICM, por sus siglas en inglés). Con una exposición de aproximadamente 1/4 de segundo, mueve deliberadamente la cámara mientras disparas, generando un desenfoque creativo que transforma escenas cotidianas en interpretaciones abstractas. Por ejemplo, puedes “estirar” un edificio moviendo la cámara desde la base hacia la cima, obteniendo un efecto casi pictórico.
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Configuración de Cámara
Para capturar movimiento en entornos urbanos, es esencial equilibrar velocidad, ISO y apertura. En escenas nocturnas o de baja luz, elige un ISO bajo (por ejemplo, 100-400) para minimizar el ruido, y ajusta la apertura de acuerdo con la profundidad de campo deseada: una apertura amplia permite una mayor entrada de luz, pero reduce la profundidad de campo, mientras que una apertura más pequeña aumentará la nitidez en toda la escena, ideal para capturar detalles.
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Si necesitas una velocidad de obturación prolongada para efectos de movimiento y la escena tiene luces directas intensas, como farolas o luces de vehículos, evita sobreexposiciones usando filtros de densidad neutra (ND) para controlar la entrada de luz sin perder el efecto de desenfoque.
Equipo esencial
Para capturar el movimiento urbano con estabilidad, el trípode es fundamental, especialmente en exposiciones largas o cuando usas teleobjetivos que pueden amplificar cualquier leve vibración. Si tu cámara tiene estabilización de imagen en el cuerpo (IBIS), podrás reducir algo de movimiento en disparos a mano alzada, pero el trípode sigue siendo la mejor opción para evitar desenfoques no deseados, sobre todo en condiciones de poca luz.
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Si además cuentas con un temporizador o control remoto para el disparo, podrás reducir el riesgo de movimiento al presionar el obturador. Considera también llevar un filtro de densidad neutra (ND) para escenas diurnas en las que quieras emplear una velocidad de obturación prolongada, ya que ayuda a reducir la luz que entra en el sensor y permite exposiciones más largas sin sobreexponer la imagen.
Capturar movimiento en entornos urbanos requiere práctica y exploración. Prueba diferentes velocidades de obturación y puntos de vista, ajusta el ISO y experimenta con el panning y el desenfoque creativo para contar historias visuales únicas. Cada una de tus tomas será una invitación al espectador a sumergirse en la energía de la ciudad desde tu perspectiva.